Queso Cabrales.
El queso Cabrales es un queso azul originario de la región de Asturias, en el norte de España. Se elabora con leche cruda de vaca, cabra u oveja o una combinación de estas, y se caracteriza por su sabor fuerte y picante, así como por su aroma intenso.
Exteriormente, el queso Cabrales tiene una corteza natural rugosa, de color gris o blanco, y su interior es de color marfil con vetas azules verdosas debido al moho Penicillium que se introduce durante el proceso de maduración. La textura del queso varía desde cremosa hasta firme, dependiendo de su grado de maduración.
En cuanto al sabor, el queso Cabrales es robusto y pronunciado, con notas saladas y picantes que pueden ser bastante intensas. Es un queso muy apreciado por los amantes del queso azul, y es ideal para comer solo, en tablas de queso, o como ingrediente en una variedad de platos, desde ensaladas hasta salsas.
El queso Cabrales es un queso azul de tradición asturiana, con denominación de origen protegida. Se elabora con leche de vaca cruda y tiene una maduración de al menos 3 meses. El queso Cabrales tiene un sabor intenso y picante, con un olor muy fuerte.
Se elabora en los Picos de Europa, una cordillera montañosa situada en el norte de España. La leche para la elaboración del queso se recolecta de vacas que pastan en los pastos de la región. El proceso de elaboración del queso es tradicional y se lleva a cabo en cuevas naturales.
Beneficios del Queso Cabrales:
Es un alimento rico en proteínas y calcio. También es una buena fuente de vitamina A y vitamina D. Mejora la digestión Contiene bacterias probióticas que pueden mejorar la digestión y fortalecer el sistema inmunológico. Contiene compuestos antioxidantes y antiinflamatorios que pueden ayudar a prevenir enfermedades como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares.
Usos:
Aperitivo: Es un excelente aperitivo. Se puede servir con un poco de pan, frutas o frutos secos.
Tabla de quesos: Es un ingrediente imprescindible en cualquier tabla de quesos. Se puede combinar con otros quesos azules, como el roquefort o el gorgonzola.
Platos cocinados: Se puede utilizar en una variedad de platos cocinados. Se puede rallar sobre ensaladas, pasta o pizzas. También se puede utilizar para hacer salsas o guisos.